Aborto espontáneo es el término utilizado para la pérdida de un bebé en las primeras 24 semanas de embarazo, lo cual suele ser muy angustiante. Si se produce el aborto espontáneo, es probable que pases por un proceso de duelo. Debes entender que es perfectamente normal experimentar estas emociones.
A pesar que en realidad nunca conociste a tu bebé, él o ella ya era parte de tu vida y es normal que tengas sentimientos de pena, reconocerlos es importante para tu salud mental y física.
¿Cuáles son las causas?
Saber la causa exacta de un aborto espontáneo es difícil, pero no debes culparte, el aborto espontáneo es involuntario y poco tiene que ver con algo que haya hecho la embarazada.
Algunas de las cosas que se sabe que lo causan incluyen las siguientes:
- Que el óvulo fecundado tenga un número anormal de cromosomas (genes). Esto ocurre al azar, de manera que no lo puedes evitar ni provocar.
- Ciertas enfermedades, como la diabetes grave, pueden aumentar el riesgo de sufrir un aborto involuntario.
- Una infección muy seria o una lesión mayor pueden causarlo.
- Los abortos espontáneos tardíos —después de los 3 meses— pueden ocurrir por anomalías en el útero.
- Si has tenido más de 2 abortos espontáneos seguidos, es muy probable que tengas otro.
¿Qué hacer en caso de un aborto espontáneo?
Aunque debes mantener la calma es importante actuar rápido. Obtén atención médica de inmediato pues esto puede reducir drásticamente la posibilidad de tener problemas a causa como:
- Perder demasiada sangre
- Presentar una infección
- Tener un embarazo ectópico (lo cual puede ser mortal)
La recuperación después del aborto involuntario
Tu cuerpo necesita readaptarse después de un aborto espontáneo. Puedes experimentar sangrado vaginal en los primeros días después de haber abortado. Sé paciente y gentil contigo misma. Necesitarás una o dos semanas antes que puedas reanudar tus actividades físicas normales.